viernes, 22 de octubre de 2010

EL PLACER DE CORRER POR CORRER

Hasta el momento la que está terminando, está siendo una buena semana. Por razones, digamos que logísticas he tenido que concentrar los entrenamientos en tres días, martes, miércoles y jueves, con lo que hoy me toca descanso, mañana sábado salida larga y el domingo salida de recuperación.
Los tres días de entrenamiento han sido muy buenos. En los tres me he encontrado muy bien. Poco a poco voy incrementando el ritmo de marcha en las salidas y he marcado ayer jueves, el que hasta ahora es el mejor tiempo de esta etapa. Cincuenta y seis minutos y doce segundos invertí en recorrer los diez kilómetros, lo que supone prácticamente una rebaja de cuatro minutos respecto al primer día en el que afronté esta distancia y que fue el pasado día 12 de octubre. Además, continúo rebajando el peso. Hoy estoy en 80 kilos 900 gramos, según la báscula.
Creo que no esta mal la evolución, pero lo mas importante creo que son las buenas sensaciones experimentadas. En todas las salidas he tenido la sensación de poder ir mas fuerte. Sensación que también me acompañó ayer, pese a que era el tercer día consecutivo de entrenamiento. Pese a ello, he seguido controlando las pulsaciones, no excediendome en ello y evitar el cebarme. En definitiva, continuo intentando correr y entrenar con cabeza y paciencia.En definitiva, me he encontrado redondo con un ritmo poco a poco mas exigente pero que puedo asumirlo con comodidad. Supongo que es el primer fruto visible derivado de la continuidad de los entrenamientos y del hecho de realizarlos con cabeza, de forma consciente y teniendo fijados unos objetivos realistas y claros. Y sobre todo creo que del convencimiento interno de que, al menos en mi caso, los resultados en esto del correr, los lograré con humildad, constancia, sacrificio, regularidad y por supuesto con un poco de suerte para evitar las lesiones u otros imponderables de similar naturaleza. Y sobre todo con ilusión y disfrutando de cada salida, sea mejor o peor. Al final, todo eso suma y todo eso hace que te acerques mas al objetivo propuesto.
Uno a veces lee por ahí objetivos absolutamente estratosféricos que se pretenden conseguir en tiempos absolutamente cortos y con entrenos, si se les puede denominar así, absolutamente irrisorios e inconstantes. Todos sabemos lo que cuesta bajar unos segundos al crono en cada salida. Por eso a veces, cuando leo esas afirmaciónes, surge en mi mente la duda de que si estarán hechas única y exclusivamente para polemizar. Por suerte, esto no es lo habitual.
No dudo en absoluto, antes al contrario, que el hecho de fijarse objetivos grandes o pequeños, da igual, es bueno. Es más, estoy convencido que todos los objetivos son grandes porque lo son de cada persona en concreto y para la misma es grande. Pero creo que sobre todo en esto del correr, los objetivos han de ser realistas y basados en nuestra condición física, en una buena planificación y sobre todo en la consciencia de nuestras capacidades reales. No basta con decir que uno puede. Yo mismo tengo un objetivo, a largo plazo en mente, correr algún día y terminar la Maraton de Nueva York. Pero para ello, antes tendré que afrontar muchas carreras de cinco, ocho o diez kilómetros, después unas cuantas medias y finalmente el maratón, el que sea antes de tratar de cumplir mi sueño. Todo ello aderezado de muchos kilometros y muchos días de entrenamiento.
A estas alturas, estoy seguro que si digo que mi objetivo es en tres meses bajar de las tres horas en una maratón, y que mi entrenamiento se reduce a tres kilómetros, tres dias a la semana, direis que algo ha fallado en mi raciocinio.
Si algo he aprendido durante todo este tiempo que llevo metido en esto del correr, es que la receta para conseguirlo llega siempre de la mano de la constancia, del sacrificio y de un entrenamiento coherente, amén de hacer acopio de los consejos y experiencias de todos aquellos que saben de esto, bien por experiencia propia, bien por estudio y conocimiento.
Estoy convencido de que, salvo aquellos que estén dotados genéticamente para esto, al resto de los mortales no nos queda otra alternativa que conjugar esos tres elementos que he citado, y seguramente habrá otros muchos mas por ahí que ahora se me escapan.
En esa marcha continúo empeñado y disfrutando plenamente del mero hecho de correr cinco días a la semana. Espero que durante mucho tiempo, esta forma de vida, esta afición o como queramos denominarla, me siga dando el mismo placer que a día de hoy. El placer de correr por correr.



PD.- Tortuga me está "retando" para que mi bautismo en esto de las carreras sea en la de Castrillón. Casi me tiene convencido. Ya hablaremos.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Por proximidad en la edad y hasta en el peso te seguimos desde La Elipa. Con tu permiso.

Saludos.
Jaal

betren dijo...

Encantado, no os hace falta mi permiso. Le Elipa me trae muy buenos recuerdos. Parte de mi familia ha vivido y sigue viviendo en ese barrio. Un abrazo y gracias

Tortuga dijo...

Cómo que casi te tengo convencido?????? Ya te tengo APUNTADO para el reto tortuga de este año.

Que mejor carrera popular asturiana que la de Castrillón para tomar la alternativa.Y además en buena compañía.